El acto, al que asistieron numerosos amigos y familiares de los alumnos, así como algunos de los profesores del curso, estuvo presidido por los codirectores Miguel Ángel Moncholi y Alejandro Pizarroso y un representante de la Fundación en nombre del maestro Joselito que no pudo estar en el acto.
La doctora Rosa Basante abrió el turno de oratoria con un discurso en el que ensalzó la figura de la mujer en el mundo del toro. En representación de los 26 alumnos tomaron la palabra Juan Tapiador, Mariano Aliaga y Patricia Rodríguez.
Tras la entrega de diplomas el doctor Pizarroso manifestó su devoción por José Tomás y dijo que el toreo es la propia vida. Por su parte, Moncholi tomó como línea de su discurso una frase que les ha inclulcado a los alumnos durante las clases: "decir siempre lo que pensáis y pensar siempre lo que vayáis a decir" y destacó la figura del periodista taurino fallecido el año pasado Rafael Campos de España. Ambos aprovecharon la ocasión para agradecer su trabajo al coordinador del curso, Miguel Ángel Bravo.
Discurso Juan Tapiador: Las clases
De noviembre a marzo, de invierno a primavera y del frío al calor. Durante cinco meses hemos compartido mesa, estuche y apuntes. Siempre como referencia el mundo del toro, han pasado por el aula profesionales de gran altura, que ojala en un futuro, alguno de los que estamos hoy aquí sentados pueda seguir su estela.
Hoy quiero resaltar la importancia de implantar un curso tan específico como éste de una temática tan arrinconada por el olvido político como la taurina. En la huída hacia delante que vivimos en la actualidad, no deja de ser sorprendente la vigencia del único espectáculo de masas que sobrevive anterior a
Por eso reitero mi reconocimiento a todos aquellos que han pasado por delante de nuestros ojos para formarnos en esta bella profesión y concretamente, en esta materia tan pura. Hemos podido escuchar a voces muy cualificadas que nos han transmitido desde diversos planos y puntos de vista, los diferentes prismas de
Si echamos la vista atrás debo mentar el magisterio de Montesinos, el repertorio de José Luis Ramón, la historia de Paco Aguado o la experiencia de Federico Arnás. Tampoco puedo dejar escapar la oportunidad para referirme a la creatividad de Sánchez Vigil o la sabiduría de conocimiento de Andrés Amorós.
Más de uno se emocionó viendo el empaque de Joselito contando aquella anécdota de la cristalera de
Olvido en la chistera muchos nombres; que me disculpen pero en dos minutos es imposible sintetizar trescientas horas de aprendizaje teórico. No puedo pasar por alto una despedida sin reconocer el mérito a los valientes que impulsan cada año esta fábrica de monstruos, como dijo el maestro Joselito.
Dejo el cierre para la terna compuesta por Miguel Ángel Bravo, Miguel Ángel Moncholi y Alejandro Pizarroso. El primero, por hacer una labor impecable en el día a día de la coordinación. Un ejemplo de total seguimiento que ha hecho que ninguna tuerca se saliese del engranaje.
Y qué decir del magisterio y la enseñanza de los catedráticos Moncholi y Pizarroso.Con Moncholi viajamos a la imaginación de la radio; aprendimos que equivocarse es de malos profesionales y que debemos decir siempre lo que pensemos, aunque pensar lo que siempre vayamos a decir…Finalizo con Alejandro Pizarroso, con el que rompimos el hielo. Termino con el principio, y es que espero que lo que aprendimos aquel 10 de noviembre lo recordéis durante mucho tiempo en las retinas.
A estos tres toreros y al resto de la cuadrilla de profesores y ponentes: gracias. Gracias por el esfuerzo, el arrojo y la dedicación que habéis tenido con nosotros. De nuevo, muchas gracias
Discurso Patricia Rodríguez: Las visitas
Y de las aulas al campo. Madrid se quedó tras el cristal de un autobús testigo de risas y de confidencias, de historias pasadas y presentes. El bullicio de la ciudad dio paso a la tranquilidad de las dehesas, donde el toro se siente el dueño y señor, donde los hombres de campo velan día a día para que muestre su bravura en la plaza.
Vidas ligadas a un oficio que más allá de la mística y de la belleza defiende una especie animal única que pasta en auténticos tesoros de la ecología y genera innumerables puestos de trabajo.
Tres ganaderías y tres conceptos de la cría del bravo. Tres hombres con un destino común pero que caminan por diferentes sendas.
Hablar de Victorino Martín es hablar del toro en mayúsculas, sin trampa ni cartón. “La fiesta es el toro y luego el torero; sin toro no hay fiesta”, esa es la filosofía que nos transmitieron las dos generaciones de la casa.
En tierras toledanas, entre encinas y olivos, nos recibió Paco Medina. Un ganadero que alcanzó las mieles del éxito con el hierro de El Ventorrillo y que hoy disfruta de su nueva etapa.
Y Victoriano del Río nos abrió las puertas de una ganadería donde el toro es para el torero. Un visionario que no ha dudado en clonar a uno de sus sementales.
Experiencias inolvidables que ya guardamos en nuestra memoria al lado de las mañanas de tentadero junto a Juan Mora. Todo un maestro que compartió cartel con dos promesas y a la vez compañeros, Marco Antonio Navacerrada y Beatriz Gómez, y algún que otro espontáneo.
Y del campo a la plaza. Coliseo de sentimientos, plegaria y liturgia, donde toro y torero hacen de la lucha un arte entre muletazos de vida y estocadas de muerte.
Conceptos, instantes, que intentamos captar como lo harían Paco Cano o Joaquín Vidal, entre flashes y apuntes, entre frío y nieve, en
En Las Ventas, en la plaza que te lo da todo y te lo quita todo, tuvimos el privilegio de asistir al reconocimiento, sorteo y enlotado de la novillada arropados por los veterinarios, Juan José Urquía y José Manuel Durán, y bajo la mirada cómplice del presidente decano, Manuel Muñoz Infante.
Dicen que la práctica es la madre de la perfección. Hoy, después de 4 meses, dejamos atrás las prácticas, las clases, las visitas, ir de la mano de… Hoy, como les ocurre a los novilleros cuando reciben los trastos de manos de su padrino de alternativa, tenemos por delante un camino duro pero a la vez bonito para alcanzar el éxito en el mundo del toro. ¡Que Dios reparta suerte! Muchas gracias.
Discurso Mariano Aliaga: Los compañeros
Muy buenas tardes a todos.
Es una gran responsabilidad y al mismo tiempo un enorme orgullo poder dirigirme a ustedes en este día tan importante y de tantos contrastes internos. Enfrentados la tristeza del día final y la alegría de haberlo vivido no quiero que mis palabras muestren una imagen equivocada de nuestra felicidad compartida a lo largo de este sueño tan corto. Y por ello demos paso a la alegría en el recuerdo de los momentos vividos porque la nostalgia vendrá sola, sin llamarla. Ahora sin lágrimas, con sonrisas, que son la muestra exacta del significado de nuestra hermandad, nuestra unidad, nuestra fuerza.
Un grupo, un conjunto, dividido para prácticas y mesas redondas basadas en el aprendizaje, reforzadas en el esfuerzo y apoyadas por el resto, formaron la mezcla ideal para el éxito. Radio profesional de novatos con más ilusión que experiencia, con rostros de nervios y responsabilidad tras la pecera, pero con voces firmes y rotundas de quien tiene la seguridad en sí mismo, la buena enseñanza aprendida y el apoyo de todos los demás tras el cristal.
Debates preparados a veces en el torobus, otras en los descansos del Camel a escondidas, entre risas, miradas de complicidad, gestos de apoyo, interés desinteresado. Todo compartido, funciones, responsabilidad, interés. Sin cargos. Cooperativa de puerta grande en cada una de las tres tardes en
Seguramente profesores y organizadores sienten que su parte profesional está cumplida y así es de sobra, pero no sean conscientes del profundo vínculo humano que se ha creado en ese aula nº 402 donde para siempre quedará impregnado el valor de la amistad y hermandad, sentimientos unidos por la sensibilidad interna y compartidos hasta hacerlos nuestros, que el recuerdo nos devolverá a la memoria para darnos el impulso y continuar.
Juntos hemos lidiado toros de asignaturas con distinto encaste de divisas con los colores de la ilusión y la esperanza desarrollados por profesores como ganaderos ilustres que convirtieron santa colomas en domeqs para que pudiésemos instrumentar verónicas a la historia y naturales a la crónica, sin largas cambiadas ni pases de alivio, cruzándonos en la cara, entre los pitones del desafío, a cara de perro para conseguir el triunfo del aprendizaje, todo con el arte propio que cada uno lleva dentro.
Para nuestro público, que son ustedes, familiares, parejas y amigos, desde afuera es difícil percibir lo vivido dentro pero les aseguro que pueden estar muy, muy orgullosos de tener a su lado a estas personas con las que comparten su vida. Toreros dentro y fuera del aula. Por ellos levanto mi montera imaginaria para mirando a los ojos de cada uno brindarles todo mi cariño. Como muestra de este sueño, sirva este video homenaje desarrollado por nuestro entrañable coordinador Miguel Angel Bravo. Muchas gracias.
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