6/04/2009

Crónica Corrida de la Beneficencia de Madrid: "Una tarde para lucir 'palmito'..."


Informa: Patricia Rodríguez

Fotos: www.burladero.com

De lo que más se presumió ayer en Las Ventas fue de 'palmito’. La Corrida de la Beneficencia congregó al todo Madrid en una asfixiante tarde que dejó más imágenes en los tendidos que en un ruedo con toros flojos y donde volvió a sonar con fuerza el nombre de Perera.


Ya lo avisaba una pancarta en la grada del 5: “Bienvenidos a la feria del choto”. Los toros de las ganaderías de Victoriano del Río y Garcigrande (4º y 5º), sin trapío y escasos de fuerza en líneas generales, no eran dignos de Madrid y claro, se montó la bronca en el 7 y donde no era el 7. Entre tanto alboroto y los 35º que se registraban en la calle Alcalá antes de comenzar la corrida, más de uno y más de dos tuvieron que ser asistidos por los servicios médicos.


“Beato”, el primero de la tarde de 541 kilos, se le declaró republicano al Juli durante su lidia. No le puso las cosas fáciles el anovillado animal al madrileño frenándose con el capote, huyendo al caballo y cabeceando y rebrincando con la muleta; pero bien es cierto que el madrileño no se supo sobreponer a las dificultades del morlaco y tras mantazos y enganchones lo mató tras dos fallidas estocadas. Con más ganas de colaborar salió “Edil”, a pesar de no declararse de ningún partido. Se vino a más Julián con el capote con tres chicuelinas que remató con una media, pero tras unas primeras series por el pitón derecho con la muleta se apagó la faena.


Jose María Manzanares dejó buenos detalles en sus dos faenas. A su primer toro -por llamar de alguna manera a lo que salió por los chiqueros-, lo recibió con hondura por verónicas, pero tras el segundo puyazo “Exclusivo”, de 530 kilos, evidenció su debilidad. La faena de muleta fue un quiero y no puedo del alicantino, que terminó en tablas intentando sacar algo. Mató con una estocada tendida tras un pinchazo. Lo mejor con el quinto llegó con una tanda por la derecha con un meritorio cambio de mano y el primer y tercer par de banderillas. Poco más se pudo ver, ni siquiera una buena estocada; puesto que a pesar de que a priori pareció un gran estoconazo cayó trasera.


Miguel Ángel Perera logró enmudecer Las Ventas cuando aquello recordaba a Pamplona. Fue en el tercero de la tarde. A “Corchero”, de 545 kilos, que ponía la cara alta con el capote, lo picaron con pinzas. Inició el extremeño la faena de muleta en la ralla de picar y hundió los pies en la arena para empezar a dar pases por la derecha. Lo probó por los dos pitones al mismo tiempo que mimaba a un toro que se iba quedando sin gas por momentos. Mató tras un pinchazo. Los olés llegaron con el sexto, un animal sin fijeza que salía suelto del capote y se paseó por la plaza en el tercio de varas. Pero Perera vio que ahí había faena y brindó al público. Realizó un bullidor inicio de faena en los medios con pases cambiados por la espalda, para comenzar a intentar ligar pases por el pitón derecho –donde el animal tenía mejores condiciones--. Destacar también una serie de bernardinas como remate. Tras una estocada fallida el público pidió con insistencia la oreja, aunque el presidente, Manuel Múñoz Infante, no se la concedió.


Pitos, palmas y una fuerte ovación, respectivamente, despidieron a los tres espadas que salieron de la plaza por el patio de arrastre bajo una gran expectación; eso sí, menor a la que causaron los príncipes de Asturias.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Titular de El Mundo:

"Deplorable espectáculo"

Pero no dice nada de que Leti nos hiciera llegar a casa una hora más tarde...

Patricia Rodríguez dijo...

Ni tampoco dicen nada de una chica con zapatos amarillos...