Nadie esperaba que la de hoy fuera una carrera limpia. Las estadísticas demuestran que los de Jandilla no son ningunos santos y esta mañana, más que santos, han sido demonios.
La carrera ha salido agrupada de los corrales hasta que el toro colorao, protagonista de la mañana, se ha puesto en cabeza a la altura del Ayuntamiento embistiendo a varios mozos contra el vallado. A partir de ese punto, la manada se ha estirado y se han visto bonitas y frenéticas carreras.
En menos de 2 minutos los primeros cinco ejemplares de Jandilla entraban a la plaza de toros, pero Capuchino, con ansias de volver a captar la atención de las cámaras televisivas, ha decidido plantar cara en la zona entre Teléfónica y el Callejón. La masificación de gente y el comportamiento del toro, que incluso ha llegado a ir en sentido contrario, ha causado verdaderas escenas de pánico con revolcones y cogidas incluidos.
El colorao ha entrado finalmente en la plaza 4 minutos y medio después de que sonara el cohete.
4 heridos por asta, uno muy grave
Según el parte de heridos se han registrado 4 heridos por asta de toro, uno de ellos se encuentra en estado muy grave con hemorragia arterial en el cuello.
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