Informa: EFE/Patricia Rodríguez
Abel Valls cumplió las expectativas de la afición castellonense y abrió la puerta grande del coso de Pérez Galdós. La novillada de la Beneficencia fue el marco en el que el castellonense volvió a ilusionar en una tarde marcada por la lluvia y donde Alejandro Esplà, hijo del maestro Esplà, también triunfó.
Cuatro novillos de Fuente Ymbro –primero, cuarto y séptimo—, tres de Jandilla –segundo, tercero y quinto—y uno de Daniel Ruiz fueron los ejemplares lidiados por los novilleros de la tierra, Abel Valls y Diego Lleonart, junto a Eugenio Pérez y Alejandro Esplà.
Así, dos apéndices les valieron a Valls y Esplà para abrir puerta grande; mientras que Lleonart tuvo que conformarse con una oreja y Pérez se fue de vacío.
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