5/15/2008

'El Rata' abre la puerta grande en su despedida de los ruedos

Foto: www.bouperlavila.com
Informa: Patricia Rodríguez

A hombros y por la puerta grande. De este modo, David Sánchez, El Rata, dijo adiós a los ruedos ante una plaza llena y una afición entregada durante el transcurso de un espectáculo que conjugó emoción y arte.

La emoción estuvo presente desde que los 25 recortadores participantes en el Concurso Nacional de Recortes de Bou per la Vila le hicieran el paseíllo al de Burriana, que hizo una espectacular entrada al ruedo con limusina. La plaza puesta en pie rompió en aplausos para arropar a El Rata en una jornada con sentimientos encontrados. "Estoy contento y nervioso, pero me da lástima. Sobre todo, estoy emocionado", afirmó.

El arte lo pusieron los recortadores que, entregados a la causa, se dejaron la piel sobre el albero ante los astados de la ganadería de Ángela Rodríguez de Arce, de buena presentación y juego desigual. Tanto es así, que el campeón de Magdalena, Pedro Imaz, se la jugó a pesar de no estar recuperado de su lesión y Juan Pedro Gurillo reapareció tras su brutal cogida en Fallas.

El mejor recorte se quedó en casa. Nacho, de Altura, sorprendió y gustó con dos buenos recortes a Estudiante, el segundo toro de la tarde, de 547 kilos. En esta suerte también mostraron sus dotes los valencianos Fran Mesas y Simón Gómez, así como Rubén Palomino y El Moro con el característico corte puro.

Julián Gómez Carpio, de Morata de Tajuña, consiguió el trofeo a la mejor pirueta gracias a un salto a pies juntos y un tirabuzón. A destacar también los ejecutados por Joel Rodríguez e Iván Sánchez a Lamparillo.

En la especialidad de quiebros, el valenciano Jorge Cervera consiguió llevarse al gato al agua, tras dejar sin respiración a propios y extraños en todos y cada uno de los concursos en los que está participando esta temporada. Cervera puso al público en pie en los dos quiebros realizados a Papelero, el mismo ejemplar al que el recortador francés David Casarín ejecutó un muy buen quiebro vasco-landés.

Y con el sexto llegó el delirio a la plaza de Castellón. Aguanieves se alió con El Rata para deleitar al respetable con quiebros de esos para enmarcar. Un impresionante quiebro de rodillas y de espalda, dio paso a otros con las manos en los bolsillos, el del baile de San Vito, con una silla, e incluso se atrevió con el reverso. Y es que el toro daba para todo eso y David tenía ganas de agradar. El alimón con su gran amigo y compañero César Palacios o el salto cedido a El Chipu fueron otros de los detalles.

Ningún recortador se quedó con su trofeo. Y es que ayer todos los premios eran para El Rata, quien celebró con la afición su 28 cumpleaños, y que fue agasajado por amigos, familiares y aficionados con sendos detalles. ¡Hasta siempre, David!.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enhorabuena al rata por el homenaje y a tí por la crónica!